
El 13 diciembre de 1963, Bob Dylan asiste en el hotel a la ceremonia de entrega del Tom Paine Award que le acaba de otorgar la E.C.L.U. (Comité de Emergencia de las Libertades Civiles). Han pasado solo tres semanas del asesinato de Kennedy y Dylan, algo ebrio, desata la ira de los asistentes cuando en su discurso de agradecimiento dice: «Ese muchacho que disparó al presidente Kennedy, Lee Oswald… no sé exactamente qué pensaba que estaba haciendo, pero debo admitir que vi algo mío en él…». Los pitidos y abucheos precipitan el final de su alocución y, días más tarde, Dylan se disculpa de sus palabras a través de una carta que finaliza con un irónico: «Nos vemos. Respetuosa o irrespetuosamente».
Cuatro años más tarde, en «As I Went Out One Morning», incluida en John Wesley Harding, parece que todavía recuerda el galardón:
As I went out one morning
To breathe the air around Tom Paine’s
I spied the fairest damsel
That ever did walk in chains
I offer’d her my hand
She took me by the arm
I knew that very instant
She meant to do me harm.