
Inaugurado en 1929, en la actualidad es un edificio residencial propiedad de Donald Trump que cuenta con 120 apartamentos de lujo y 8 áticos.
El 28 de agosto de 1964, Bob Dylan visita a The Beatles en una de las suites que el grupo tiene en el sexto piso del hotel. Acaban de ofrecer un concierto en Forest Hills Tennis Stadium y en la puerta del hotel se concentran cientos de jóvenes que esperan ver a sus ídolos. Dylan llega acompañado del periodista musical Al Aronowicz y ambos consiguen abrise camino entre la multitud y reunirse con los cuatro de Liverpool. La admiración es mutua y, tras intercambiar algunas formalidades, Dylan rompe el hielo y pregunta si hay algún vino para tomar. En la habitación solo hay champagne francés y whisky, así que Lennon manda que les traigan varias botellas. En un ambiente ya totalmente distendido, Dylan saca una bolsita con marihuana y les ofrece. Al parecer no fuman, lo que sorprende a Dylan, que cree que en «I Want To Hold Your Hand» cantan I get high (me drogo), aunque en realidad dicen I can’t hide. The Beatles aceptan el ofrecimiento y la noche se convierte en un delirio de risas y buen rollo.